jueves, 18 de julio de 2019

Alerta de consumo

Me pone triste que actualices tu contenido sin mí. Me avisaste de que esto me pasaría, de que algún día necesitaría gritarlo a alguien, que te daba pena que no fueras tú entonces. Fui cruel, pensé que sería más fácil para ti odiarme que quererme porque no estaba preparada y aún no lo estoy, pero ahora veo las cosas diferentes. Tenías razón.
Me está partiendo en dos verte sonreír sin mí y como si te hubieras olvidado. Aparentas genial.
Me siento fatal, no puedo decírtelo porque irrumpiría en tu vida y en la suya sin derecho, sin explicaciones, sin saber qué pedirte.
El problema soy yo, lo he sido siempre. Claro que te quise, a mí manera de mierda, pero lo hice. Igual eso fue lo que desencadenó todo: mi fuga inexorable lejos de ti sin pensarte ni un solo segundo.
Al final has encontrado una manera de meterte dentro y hacerme daño, de desordenarme la cabeza y perder todas las piezas de mis puzzles.
Ahora tú haces tu vida sin mí, tan lejos que parece un reflejo, que parece que nunca fue real y que soy yo la que le da vueltas a la noria.
Me estoy haciendo daño sin querer y sin poder evitarte. Ayer soñé contigo y todo estaba como antes, que no necesariamente bien. No me olvido ni cerrando los ojos.
Menos mal que no puedes saberlo porque no sé qué daño podría hacerte yo si supieras mis ganas de ahora.
Entiendo tu calvario y espero que tú ahora no pienses en mí, tal y como yo hice antes, que me borres y te alejes tanto como puedas.
Esta vez te prometo intentar no volver.

domingo, 14 de julio de 2019

Oven

Ni siquiera mi obertura me ha dejado contártelo mirándote a los ojos, desde dentro.
Nunca pensé que fuera capaz. Por supuesto no te lo he contado todo, solo he dosificado la parte que necesitas saber si en algún momento decido contarte el resto.
Te has abierto como antes, sin tanques en los ojos. Me has dado pie, has esperado paciente a que tuviera valor.
"¿Sorprendida? ¿Asustada?" Tu negativa me ha salvado. Te he dicho que fueras valiente y te enfrentaras a tus quimeras. Te voy a ayudar, voy a ser la persona que necesitas al lado y todo va a salir bien.
Ahora que sé que estás bien, con el corazón ocupado y sin peligro a la vista sé que no tengo por qué decirte nada que te altere, menos cuando sólo habría una respuesta posible que no quiero oír. Y no quiero arruinarlo.
Sé que mi interés nace de la alegría genuina que me provoca tu tiempo y tus ganas, pero voy a revertirlo para que no me haga daño y para que no puedas hacérmelo tú sin querer.
Solo necesitaba hablar contigo, que me entendieras. Lo has hecho genial hasta el final. Quiero que te quedes cerca para que el tiempo y el espacio entre medias no nos separe de esta forma y no haga que me vuelva loca otra vez. Esta vez sí.
Voy a trabajar en cuidarme para algún día no cagarla otra vez. Quiero arreglar del todo este vínculo y hacerlo bonito, sin miedo.
Voy a estar ahí cuando lo necesites siempre. Aunque no lo sepas 100% y aunque pienses que a veces soy demasiado.
Y con todo no he conseguido controlarlo y he acabado vomitando en vísperas de que te fueras. Porque el reloj ha vuelto a volar y he sentido tu prisa. Y aunque tengo que cambiar todo esto ahora sé que puedo hacerlo para no ponerte en el compromiso de no entenderme.
Es la tercera vez que no controlo tu prisa ni tu mundo girando a toda velocidad a mi alrededor y me mareo y vomito. Espero que sea la última. Voy a intentarlo de verdad, con todas mis fuerzas. No quiero que te lleves ese recuerdo, el parque nos ha amparado de una forma especial y quiero forjar un recuerdo nuevo.
Gracias por lo revelador de esta noche.